Entrevista a Francisco Javier Fernández Campal

Entrevista a Francisco Javier Fernández Campal

diciembre 19, 2010 Desactivado Por inQualitas
Francisco Javier Fernández Campal
Francisco Javier Fernández Campal
Presidente de la Fundación La Casa que Ahorra
«Si rehabilitáramos todas nuestras viviendas, podríamos llegar a ahorrar el 30% de energía y emisiones de CO2 de nuestro país y recuperar la inversión en cinco años»

Francisco Javier Fernández Campal es ingeniero industrial por la Universitat Politècnica de Catalunya (UPC). Tiene más de 25 años de experiencia en el sector de la construcción y es director general de una de las empresas que forman parte del patronato de la Fundación La Casa que Ahorra. Se trata de una entidad que nació en España con el objetivo de conseguir viviendas energéticamente más eficaces.
¿Cómo tiene que ser una ‘casa que ahorra’?
Una ‘casa que ahorra’ debe partir de una orientación estratégica, un diseño eficiente, un aislamiento óptimo, vidrios de alta eficiencia térmica, ventilación controlada y debe estar construida con materiales sostenibles. El aislamiento óptimo es una característica fundamental que permite ganar en eficiencia energética y en calidad de vida gracias a un perfecto confort térmico interior, pero no es menos importante que nuestra casa cuente con otros dos elementos fundamentales de cualquier vivienda sostenible. Me refiero al confort acústico y a la seguridad de los que habitan la casa, a través de una adecuada protección pasiva contra incendios.
¿Hasta dónde puede llegar el ahorro económico y energético de las ‘casas que ahorran’ en comparación con una vivienda habitual?
La ‘casa que ahorra’ es tan confortable como una casa convencional, o incluso más, pero demanda entre un 70% y un 90% menos de energía, unos datos que vienen corroborados por el Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía, IDAE. Según este organismo, si transformásemos todas las viviendas de España en ‘casas que ahorran’, reduciríamos el gasto energético nacional aproximadamente en un 30%, las emisiones de CO2 en una proporción similar y en sólo cinco años habríamos amortizado las inversiones realizadas. Esta situación nos permitiría estar más preparados para competir y estaríamos más cerca del equilibrio medioambiental que todos deseamos recuperar, y de cumplir los objetivos fijados por la Unión Europea y otros acuerdos internacionales que hemos suscrito.
¿Han medido sus beneficios medioambientales?
Volviendo a tomar fuentes del IDAE, que como sabe es un organismo dependiente del Ministerio de Industria, en el consumo energético el capítulo más importante corresponde a las viviendas. En la UE los edificios son responsables de un 41% de la energía total consumida, superando al transporte (33%) y la industria (26%). Si rehabilitáramos todas nuestras viviendas y las convirtiésemos en casas que ahorran, podríamos llegar, como he comentado anteriormente, a ahorrar el 30% de la energía y emisiones de CO2 de nuestro país y podríamos recuperar la inversión en cinco años.
¿De qué manera trabajan desde su fundación para fomentar este tipo de viviendas?
Concienciamos y sensibilizamos a los ciudadanos sobre la necesidad de contar con viviendas eficientes, desarrollamos actividades de información dirigidas a las Administraciones Públicas, medios de comunicación y profesionales de la construcción. No en vano acabamos de participar en el Congreso Nacional de Medio Ambiente, el CONAMA, que es una referencia a nivel europeo. Además de contar en este espacio con un stand, hemos celebrado un encuentro con distintos agentes sociales relacionados con el medio ambiente para darles a conocer nuestra fundación y sus objetivos, además de los proyectos más inmediatos que vamos a emprender. También hemos participado en Solar Decathlon Europe y seguiremos propiciando el desarrollo de conocimiento especializado mediante la organización de distintos cursos, conferencias, seminarios, nuestra asistencia a ferias, congresos y actividades afines.
Solar Decathlon Europe
La Casa que Ahorra en el Solar Decathlon 2010
¿Cómo y cuándo surgió la idea de crear la Fundación La Casa que Ahorra?
Empresas líderes del sector de materiales de construcción nos unimos hace un año y decidimos crear la fundación. Teníamos un objetivo claro que transmitimos en cuantos foros participamos: sensibilizar a todos los sectores de la sociedad sobre la importancia de la eficiencia energética en la edificación y los beneficios que puede reportar para el ahorro económico y energético, la protección del medio ambiente y la creación de empleo. Incorporando, además, criterios de confort acústico y seguridad pasiva contra incendios a la definición de viviendas sostenibles.
¿Qué sectores trabajan de cerca con su fundación para promover los edificios sostenibles?
Recientemente hemos suscrito un acuerdo de colaboración con la Federación Española de Municipios y Provincias, FEMP, para desarrollar en distintas ciudades del país el Programa de Diagnóstico Energético del Hábitat Urbano, PDEHU. Realizaremos un estudio energético de determinados edificios, empleando termografías y otras herramientas de diagnóstico y elaborando un informe que incluya recomendaciones de actuación para cada caso. De esta manera conoceremos los problemas de eficiencia más frecuentes en nuestros edificios, y podremos lograr una mayor concienciación y sensibilización mediante la divulgación de estos resultados a la ciudadanía. También mantenemos contacto con otras administraciones públicas y entidades privadas para que fijen los niveles obligatorios de eficiencia energética que debe cumplir el parque residencial de edificios y pongan en práctica los mecanismos de ayuda que los ciudadanos necesitan para pasar a la acción, de modo que su casa comience a ahorrar de verdad.
¿Alguna queja sobre sectores o instituciones que deberían estar más implicados en su proyecto?
Creo que aún es pronto para hablar de quejas. Tenga en cuenta que la Fundación La Casa que Ahorra aún no tiene un año de vida y nos queda mucho por hacer, y sobre todo, mucho para involucrar a todas las administraciones.
¿Cómo trabajan para desarrollar nuevos sistemas de ahorro y sostenibilidad en las casas?
Como he comentado más arriba, sobre todo divulgando nuestros objetivos. ¿Y cómo lo hacemos? A través de nuestra presencia y participación en distintos foros que nos permitan informar, pero a la vez sensibilizar, tanto a ciudadanos como a todo tipo de sectores implicados sobre las consecuencias energéticas y medioambientales que provoca el derroche de energía en nuestras viviendas.
Stand Conama 2010
Stand de La casa que Ahorra en el décimo Congreso Nacional del Medio Ambiente (Conama)
¿Puede la transformación de nuestro parque inmobiliario en casas más sostenibles ayudar a mejorar la situación del sector de la construcción en España y conseguir que mantenga un crecimiento sostenido? O, por el contario, piensa que puede generar una nueva burbuja.
Estoy convencido que puede revitalizar el sector de la construcción. Las medidas que defendemos desde la Fundación La Casa que Ahorra van dirigidas tanto a vivienda nueva como a la rehabilitación de las ya existentes. En estos momentos en nuestro país, el 80% de las viviendas, es decir, unos 17 millones, fueron construidas hace más de veinte años, sin tener en cuenta los criterios de eficiencia energética que conocemos hoy en día. Así que nos queda mucho por hacer.
Para los que todavía no puedan cambiar su vivienda por una ‘casa que ahorra’, ¿qué pequeños gestos les recomienda para que sus hogares se acerquen más a ese modelo?
Es cierto que no todos y no siempre estamos en condiciones de acometer una actuación de rehabilitación integral en casa. Pero hoy en día disponemos de soluciones técnicas mucho más sencillas y económicas de lo que a veces se piensa para mejorar el confort en nuestras viviendas y reducir su consumo energético. Nos podemos plantear una sustitución de acristalamientos por otros de mayor eficiencia energética. O, por ejemplo, la colocación de aislamiento por el interior en una habitación orientada al norte, como puede ser un dormitorio que por experiencia sabemos que tiene una pared fría que nos provoca una pérdida importante de confort. Con una sencilla y rápida actuación podemos conseguir beneficios importantes y no debemos olvidar además que existen programas de ayudas para este tipo de mejoras en todas las Comunidades Autónomas.
Rubén Urdiales