Una cesta de cerezas amargas
Ha venido el año 2024 con nuevos conflictos envenenados, que me resultan especialmente dolorosos. Dicen algunos expertos que el nivel de violencia en el mundo, así como el de la pobreza, ha descendido notablemente respecto al pasado y tienen datos, pero los humanos vivimos un corto periodo de tiempo, demasiado corto para que nos consuelen las cifras históricas cuando nos asaltan, en presente, imágenes o experiencia terribles. Ahora mismo, quiero pensar que los horrores de este presente son víspera de tiempos mejores a pesar de las apariencias, lo prefiero mucho más que comprarle a Borges su despiadado “todos los hombres viven tiempos infames”.