Competitividad y visión estratégica en el clúster de la industria automovilística catalana

CIAC, la importancia estratégica del automóvil en Catalunya

El Clúster de la Industria de la Automoción de Catalunya (CIAC) es una asociación sin ánimo de lucro, abierta a empresas vinculadas al sector de la automoción con sede en Catalunya, y que tengan actividad de I+D+i. El propósito principal de la entidad es reforzar la competitividad de la industria del automóvil como motor de la economía catalana. Para conseguirlo, se ha diseñado un plan estratégico con una serie de objetivos a medio y largo plazo, que garantizan su desarrollo en el nuevo marco de la industria global.

El CIAC, fue presentado a la sociedad catalana el 30 de abril de 2013, en el Salón Sant Jordi del Palau de la Generalitat, por el presidente de la Generalitat de Catalunya Artur Mas y por el presidente del clúster, Vicenç Aguilera. El clúster nace con el apoyo de toda la industria catalana. En el acto de presentación participaron más de 300 representantes del mundo de la automoción de Catalunya, entre ellos, el vicepresidente de Recursos Humanos de SEAT, Josef Schelchshorn; el consejero director general de Nissan Motor Ibérica, Frank Torres; el presidente de FICOSA, Josep Maria Pujol; el director general de Doga, Toni Garcia, y el gerente del Sur de Europa de Gestamp, Josep Maria Ardèvol.

Según Artur Mas, la creación del clúster es “uno de los mejores mensajes que podemos dar en estos momentos complicados en que hay mucha gente uniéndose para que la industria tradicional como la del automóvil tenga futuro y cree expectativas”.

El principal objetivo del CIAC es reforzar la competitividad de la industria del automóvil, impulsando proyectos que ayuden a generar puestos de trabajo, y a situar la industria local dentro del contexto global. El clúster quiere representar a las casi 500 empresas que, de forma directa o indirecta, trabajan para la automoción en Catalunya. El clúster no tiene una dotación económica pública, sino que se financia mediante las aportaciones de las empresas asociadas.

El núcleo constituyente del Clúster lo integran las empresas SEAT, Nissan, Gestamp, FICOSA y Doga, que en su conjunto facturan 10.000 millones de euros y dan empleo a 18.300 personas. Está impulsado por el Gobierno de la Generalitat de Catalunya, y nació con la voluntad de ampliar el número de miembros con la incorporación de otras empresas y entidades del sector.

El presidente del CIAC, y también de Circuit de Montmeló Barcelona-Catalunya, es Vicenç Aguilera, ingeniero industrial con una larga y exitosa trayectoria en cargos directivos en Nissan, SEAT y FICOSA. Los vicepresidentes son Juan Ramón Rodríguez, de SEAT, director del nuevo Centro de Formación en Catalunya, y Sergio Alcaraz, de Nissan, manager general del NE-New Vehicle Engineering (AMIE). El secretario es Francesc Perarnau, de Gestamp, director de Estrategia en Investigación e Innovación. Toni García, de Doga, es tesorero y general manager, y Lluís Cano, director de Recursos Humanos de FICOSA, es vocal de la entidad.

A finales de abril de 2013 se presentó el CIAC
en el Palau de la Generalitat, con dos vehículos que
SEAT y Nissan fabrican en sus plantas de Catalunya.

Por ahora la nómina de asociados del CIAC la integran las empresas A. Raymond-Tecniacero, proveedor industrial de sistemas de fijación rápida; Adecco Automotive, división especializada en el reclutamiento, selección, evaluación, formación y puesta a disposición de profesionales para empresas del sector automovilístico; Akzo Nobel, multinacional especializada en pinturas industriales; Altran, líder global en innovación y consultoría en ingeniería de alta tecnología; Análisis y Simulación S.L. compañía de implantación de soluciones de ingeniería; Audi Tooling Barcelona, filial de Audi dedicada a proyectos de matricería y líneas de soldadura para el Grupo Volkswagen; la ingeniería alemana Bertrandt AG; Bosch sistemas de frenado, la compañía de ingeniería Btech; la empresa de innovación Cadtech; la firma de servicios CFIT; el operador logístico CIL-Logística Dedicada; el Circuit de Barcelona-Catalunya; el fabricante de neumáticos Continental; el proveedor Daher-Unigel; la firma de software 3D Dassault Systemes; el fabricante de componentes Denso; el proveedor Doga; Estampaciones Foga, especialista en estampación, soldadura y montaje de componentes metálicos para la industria del automóvil; la firma de ingeniería Feedbackground; los fabricantes de componentes Ficosa Internacional y Francisco Albero; la Fundació Privada Ascamm; el fabricante de componentes Gestamp; la empresa de aceros y aluminios Gonvauto; el proveedor Industrialesud; Infun, empresa de diseño y fabricación de componentes metálicos; la empresa de soluciones integrales Ingedetec; la firma de soluciones informáticas Iniker; la empresa de robótica Kuka Robots, la compañía de componentes Lear; el fabricante de componentes Linde-Wiemann; la química MacDermid; Manufactura Moderna de Metales; la firma de ingeniería y consultoría Matis Hispania; el proveedor Matri-Dimart; el fabricante de matrices Matribages; el proveedor de moldeados sintéticos Moelsi; el fabricante Nissan; la firma de pinturas Pinter; el fabricante de antenas Premo; la firma de ingeniería industrial Promaut, la empresa de cristales Saint Gobain Sekurit; el fabricante de vehículos Seat; el líder tecnológico Siemens; la multinacional alemana T-Systems; la empresa de embalaje Tecnicarton; la firma de útiles de control Tecnomatrix BCN; la empresa de elevadores Thyssenkrupp System Engineering; la textil Trety y el proveedor Zanini.

Desde el punto de vista organizativo, el CIAC cuenta con cuatro grupos de trabajos:

Por un lado, la Comisión de Formación: este grupo pretende velar por la formación específica que la industria requiere de la automoción, que a menudo las empresas del sector no encuentran con facilidad y que el hecho de compartir estas inversiones en formación con otros sectores de la cadena de valor les puede resultar demasiado costoso. Tiene el compromiso de cubrir necesidades específicas que abarcan desde las necesidades de formación más elementales hasta las de los ejecutivos, pasando por la formación de los universitarios que quieren trabajar o que ya trabajan en el sector. Con este propósito, impulsa y gestiona la creación del nuevo Centro de Formación Integrado de Catalunya para potenciar la formación profesional, ocupacional y de demanda para las empresas del sector.

La Comisión de Competitividad trabaja para poder posicionar la industria de la automoción de Catalunya como un referente de competitividad en el mundo. Desde esta comisión se desarrollan, con la participación de las empresas socias y colaboradoras del Clúster, proyectos que persigan modelos de negocio más ágiles y más eficientes. La comisión de competitividad, como el resto de comisiones constituidas en el Clúster, pretende fomentar y facilitar a sus socios la cooperación entre las empresas del sector y con las diferentes administraciones. De uno de los proyectos de la comisión de competitividad nacerán, a medio plazo, servicios de compras y aprovisionamientos de productos y servicios no estratégicos que ofrezcan beneficios a los asociados.

La Comisión de Tecnología pretende realizar actividades de investigación, desarrollo e innovación llevando a cabo proyectos conjuntos entre los asociados y aprovechando sus capacidades y sinergias con las Administraciones. Tiene también como objetivo conseguir atraer inversiones en nuevas tecnologías, aplicadas tanto a producto como a procesos industriales. La comisión pone también énfasis en desarrollar y potenciar tecnologías aplicadas a la movilidad y a las infraestructuras dentro del programa marco estratégico “Horizon 2020” de la Unión Europea.

La Comisión de Innovación de productos tiene como objetivo generar componentes de futuro, nuevos conceptos y productos de alto valor añadido dentro del sector de la automoción, teniendo en cuenta las tendencias del mercado. Los proyectos colaborativos entre los asociados pretenderán, por un lado, innovar los productos actuales de manera que queden diferenciados, y por otro, traducir las necesidades actuales y futuras del mercado en materia de automoción y movilidad en nuevas especificaciones de nuevos productos en los que trabajar.

La primera Asamblea del CIAC se celebró
en noviembre de 2013. En la foto, el presidente
Vicenç Aguilera con los miembros del consejo
directivo del clúster.

Más allá de sentar las bases teóricas y estratégicas de la industria catalana, el Clúster ya ha llevado a cabo importantes acciones desde su fundación el pasado mes de abril. En noviembre ya celebró la primera Asamblea General con los asociados. Además, ha participado en importantes misiones comerciales y ferias internacionales.

Según el presidente Vicenç Aguilera, Catalunya puede dar un gran salto en la competitividad del sector del automóvil. Un sector que es estratégico, ya que la industria del automóvil genera aproximadamente el 10% del volumen de negocio del conjunto de la industria. Catalunya cuenta con dos grandes fabricantes como SEAT y Nissan, así como con importantes proveedores, empresas de diseño, todo tipo de componentes y servicios auxiliares. Por otro lado se están llevando a cabo proyectos relacionados con el vehículo eléctrico. Barcelona es un referente en el ámbito de las smart cities, y en este sentido el CIAC pretende poner en valor y reforzar la competitividad de la industria.

Otra de las estrategias que quiere llevar a cabo el CIAC es establecer sinergias entre miembros que forman parte del Clúster, así como fomentar la cooperación e intercambio de conocimiento. Otro de los retos es mejorar la formación de los profesionales, así como sistematizar la innovación abierta.

Aguilera señala como otros retos el impulso internacional de las empresas, potenciar el despliegue y la utilización de infraestructuras de telecomunicaciones y colaborar para definir una agenda estratégica en el ámbito de la movilidad sostenible.

“La función principal del Clúster es articular una estrategia de futuro para conseguir que la industria del automóvil siga siendo uno de los motores de la economía catalana. Barcelona tiene el potencial necesario para convertirse en el hub del sur de Europa, que ofrezca la mejor formación, desde la FP la formación de directivos, yo digo desde los 18 hasta los 81 años”, indica Aguilera.

El presidente del CIAC apunta que, pese a la crisis, la situación invita al optimismo. “En Cataluña tenemos dos fabricantes, Nissan y Volkswagen, y eso es bueno, porque en otras regiones solo tienen un fabricante, o ninguno. Es bueno no depender de un único fabricante. El otro punto positivo es que, en principio, tanto Nissan como Volkswagen van a crecer, o así lo han expresado públicamente. En Cataluña tenemos unos veinte proveedores de nivel medio-alto. Pero lo que ocurre es que de todo lo que se necesita para construir un coche, a lo mejor podemos ofrecer el 60% de los componentes, mientras que en algunas regiones de Alemania pueden tener alrededor del 80%. En el Clúster de la Indústria d’Automoció de Catalunya estamos trabajando para mejorar estos datos. Tenemos proveedores del ámbito metálico, del plástico, de la electrónica, etc. Hay un tejido empresarial bastante bueno, pero nos gustaría que la pirámide de proveedores fuera más amplia”.

Desde el punto de vista de Aguilera, la gran partida se juega en Asia-Pacífico. “En esa zona en los próximos años se van a fabricar la mayoría de los vehículos. Eso no significa que las empresas catalanas no tengamos nada que decir. El futuro pasa por la cooperación, por ser más eficientes y competitivos apoyándonos en la tecnología y en el diseño, y en la mejora de la logística. En este sector la competencia es feroz y cualquier manera de reducir los gastos es buena para conseguir ganar las luchas internas de los fabricantes. La filosofía es cooperar para competir globalmente. Y lo podemos hacer desde varias vías: formación, competitividad, logística, tecnología de producción y producto. Es un mercado estratégico y lo normal sería instalarse en esas zonas. Europa, si nos fijamos en su territorio, población y mercado, es sólo una pequeña parte del mundo. El 80% del negocio mundial del automóvil estará en Asia-Pacífico. Si queremos ser operadores globales ya tendríamos que estar allí. Algunas empresas ya están bien posicionadas. Otras son más pequeñas y necesitan acompañamiento o buscar fórmulas alternativas para poder estar allí”.