El asociacionismo entre el alumnado de las escuelas de negocios

ICADE significa Instituto Católico de Administración y Dirección de Empresas. ICAI se refiere a Instituto Católico de Artes e Industria. Ambas instituciones avanzan en el camino de la excelencia de la mano de la compañía de Jesús.

Yo las centraría básicamente en: la necesidad de reorientación en rutas profesionales; el reciclaje de desempeños ajustados a las exigencias del momento en que nos encontramos; resolver las disyuntivas de asentamiento en ambientes desconocidos (lugares, preferiblemente); y la reafirmación en las propias habilidades para orientarlas a la tarea profesional, sobre todo, confianza en sí mismo.

Efectivamente, en el 2012 ICADE Asociación ha celebra el 50 aniversario de su fundación. Ya han transcurrido cinco décadas desde su nacimiento en un momento en que se siente la necesidad de un cambio total en la Iglesia, la necesidad de un concilio, en un momento en que el país empieza a acusar síntomas de cansancio de una rutina política y empresarial de estructuras férreas.
El 31 de enero de 1963 fue reconocida legalmente por resolución de la entonces Dirección General de Política Interior del Ministerio de Gobernación. ICADE Asociación, como todo elemento vivo, a lo largo de estos años, algunos muy difíciles para la sociedad española —como la tremenda crisis que estamos soportando en la actualidad— ha crecido, aprendido y madurado. Ha atravesado momentos de gran esplendor y otros con menos luz de los que ha sabido reponerse y adquirir experiencia y sabiduría.
Hemos sabido evolucionar, pero conservando siempre intactas la ilusión y las ganas del primer día. Por eso no es de extrañar que, tras cincuenta años de andadura, podamos presumir de una salud envidiable.

Nuestra Asociación trata de fomentar la realización de actividades de formación entre sus miembros; facilita el acceso al mercado laboral de los antiguos alumnos y la promoción de los mismos en su ámbito profesional a través de una bolsa de empleo propia y del Servicio de Apoyo al Asociado; trabaja para el mantenimiento de relaciones de cooperación y colaboración con la Universidad Pontificia Comillas y con diferentes colectivos, empresas e instituciones y el acercamiento de las actividades que las mismas emprendan.
Igualmente está abierta al intercambio, las relaciones y la colaboración con otras Asociaciones y no descarta la posibilidad de formar parte de Federaciones y Confederaciones de carácter nacional e internacional.

Acto de Entrega de los Premios ICADE Asociación 2012, celebrado el pasado 22 de Noviembre.

El trasvase de experiencia de los seniors en beneficio de los juniors, así como la aportación de sinergias de los más jóvenes se entrelaza en un feed-back constante dispuesto en cada uno de nuestros programas, servicios y actividades. De esta forma se consigue un beneficio mutuo entre ambos segmentos.

El principal obstáculo al que se enfrentan actualmente nuestros jóvenes, por los tiempos que atraviesa la situación económica española, es la búsqueda de empleo o el cambio de empresa. En este sentido, ICADE Asociación brinda servicios que ya he mencionado anteriormente, y que insisto en destacar por su vital importancia, como el Servicio apoyo al asociado, que sirve para orientar o reorientar al asociado en este ámbito descubriéndole caminos que tal vez no había contemplado o profundizado en ellos; nuestra propia bolsa de empleo y nuestros estrechos vínculos con diferentes empresas colaboradoras.

Crecer en número de asociados, llegar a las nuevas promociones y continuar alimentando nuestra colaboración con la asociación hermana ESADE. Además, se va a constituir una confederación de asociaciones de antiguos alumnos de jesuitas cuyos socios fundadores serán las asociaciones de ICADE, ESADE y DEUSTO.

Firma del preacuerdo entre las Asociaciones de Antiguos Alumnos de DEUSTO, ESADE e ICADE el 25 de Febrero de 2010.

Especialmente nosotros actuamos tratando de establecer convenios con empresas y ofreciendo la ayuda necesaria en la obtención de empleo a través de servicios como nuestra propia bolsa de trabajo.

Yo diría que es más bien la cooperación la que debiera presidir las distintas instancias de la estructura estatal. Los responsables de la función pública, legislando y arbitrando con equidad; el empresario orientándose hacia fórmulas de calidad y competitividad, además de la clásica faceta económica; la acción sindical adaptándose en sus fórmulas y legítimas pretensiones a los tiempos en que nos toca vivir; y el trabajador, que en definitiva lo somos todos, asumiendo con responsabilidad activa y determinada disposición su protagonismo en unos tiempos críticos que han de superarse desde dentro y con decencia.

Edificio, en la calle Reina, 33 de Madrid, en el que se ubica la sede de la entidad.

Es tiempo de dejarnos de discusiones filosóficas e imputaciones al ajeno para entregarnos con decidida voluntad a la tarea común sin exclusiones ni complejos. Nuestros valores no están en crisis, lo que verdaderamente impide una más rápida salida es el deficiente ejercicio de esos valores, cuya grandeza en raíz es existente y además son apreciados históricamente en nuestro talante hispánico. En mi opinión, no hay una crisis parcelada, sino el efecto natural de unos intereses encontrados por egoísmos que deben ser superados en pautas de solidaridad y buen ejercicio.
No somos espectadores, por lo que, permítame que en lugar de ver salir de una crisis, sin duda alguna, nos sintamos cada uno pieza indispensable en su superación. La salida de la crisis no dependerá de azares y de concesiones gratuitas sino del grado de esfuerzo y tenacidad que pongamos en la tarea de interpretar mejor nuestra propia vida.