Fomento de la calidad en las Escuelas técnicas superiores

Vicerrector de Ordenación Académica y Planificación Estratégica y jefa del Área de Evaluación y Planificación de la Universidad Politécnica de Madrid

«La inmensa mayoría del profesorado de la UPM desarrolla su labor haciendo de puente entre la generación de conocimiento y su transferencia a la empresa»

En cuanto a los estudiantes tenemos del orden de 44.000, de los que en torno a 41.000 son estudiantes de titulaciones oficiales y 3.000 cursan estudios de máster propio y de formación continua. De forma más concreta, en el curso 2010-11 la Universidad Politécnica de Madrid tiene 38.700 estudiantes matriculados en las titulaciones de Graduado, Arquitecto, Ingeniero, Licenciado, Arquitecto Técnico e Ingeniero Técnico que oferta en sus Centros. De ellos, 26.831 están inscritos en titulaciones cuyos planes de estudio son anteriores al R.D. 1393/2007 (es decir, anteriores al llamado “proceso de Bolonia”) y el 8.857 están matriculados en los nuevos títulos de Grado que la UPM inició a partir de septiembre de 2009. Finalmente los 2.112 estudiantes restantes están inscritos en los nuevos títulos de Máster Universitario. Previsiblemente, a medio plazo y debido a la reciente implantación en las universidades españolas de las titulaciones de Máster Universitario, la situación anterior se modificará. Nuestras previsiones a cinco o seis años son que en la UPM habrá entre 23.000 a 25.000 estudiantes en titulaciones de grado y entre 15.000 y 17.000 inscritos en titulaciones de máster universitario. A los anteriores hay que añadir 2.397 estudiantes matriculados en los programas de doctorado que oferta la universidad y algo más de 2.900 estudiantes en títulos propios (máster, especialidad y formación continua).

En lo concerniente a la plantilla de personal de la UPM, hay en la actualidad 5.745 personas trabajando en la Universidad: 3.388 personas del Personal Docente e Investigador (P.D.I.) y 2.357 personas que forman la plantilla de Personal de Administración y Servicios (P.A.S.). De forma más concreta, en el personal docente e investigador hay 381 catedráticos de Universidad, 94 catedráticos de Escuela Universitaria, 1.260 profesores titulares de Universidad, 626 profesores titulares de Escuela Universitaria, 361 profesores asociados, 137 contratados doctores, 42 colaboradores, 42 ayudantes doctores, 63 ayudantes, 24 maestros de laboratorio y 66 personas en otras figuras de profesorado. El 76,12% de la plantilla docente e investigadora tiene dedicación completa en la UPM y el 23,88 restante compatibiliza sus tareas en la UPM con otras ocupaciones. Asimismo entre el P.A.S. hay 1.185 personas con plaza de funcionario, distribuidas en distintos niveles de la función pública, y otras 1.172 personas con contrato laboral, también distribuidas en diferentes categorías. A la plantilla anterior deberían añadírsele un colectivo de unos 1.000 investigadores que están contratados temporalmente para el desarrollo de proyectos de investigación que se desarrollan con empresas y entidades privadas.
En cuanto al presupuesto, en 2010 el presupuesto total de la UPM fue de 412.556.916,25 €. De este presupuesto, grosso modo, el 58% tiene su origen en la Comunidad, el 21% se obtiene de las tasas y precios públicos de inscripciones en los estudios ofertados y el 21% restante es generado a través de los proyectos de investigación obtenidos en convocatorias públicas competitivas, ya sean autonómicas, nacionales o internacionales, así como a través de los proyectos de investigación e innovación que se contratan con empresas y entidades privadas.
Finalmente cabe señalar que anualmente egresan en la UPM del orden de 4.000 arquitectos ingenieros, licenciados, arquitectos técnicos e ingenieros técnicos (en 2009 hubo 4.255 y en 2010 fueron 3.868 egresados). A ellos, en 2010, se les añaden 358 egresados de máster, si bien, como se ha señalado anteriormente es de prever que esta incipiente actividad en máster (iniciada en 2006-07) se vea muy intensificada. En cuanto a la producción anual de doctores, en la UPM se leen más de 200 tesis doctorales cada año. En 2010, concretamente 227 personas presentaron su tesis doctoral obteniendo el título de doctor.

Es cierto que la organización de la Universidad es compleja ya que existen diferentes órganos y agentes que participan, según corresponda, en su gobierno, dirección y gestión. Esta complejidad se hace aún más patente en el momento en que hay que realizar una revisión completa de uno de los grandes procesos clave de la universidad, la docencia, sobre todo cuanto, al mismo tiempo, se siguen impartiendo los títulos anteriores. ¿Podría imaginarse que en una fábrica, por poner un ejemplo, al tiempo en que se sigue produciendo y vendiendo a todo ritmo, se tenga que hacer una redefinición y reorganización de todos sus procesos productivos, de los resultados y de la previsión de ventas? Una locura, ¿verdad?, pues esa es la situación en la que estamos viviendo en la universidad desde hace unos años y más intensamente estos dos últimos.
Sin embargo, la UPM ha visto esta situación como una oportunidad para redefinir y actualizar el mapa de títulos universitarios y ofrecer títulos de grado y postgrado que respondan a las necesidades cambiantes de una tecnología que avanza, cada vez, a un ritmo más acelerado, abriendo nuevos campos de conocimiento y tecnología que difuminan, cada vez más, las barreras existentes entre las diferentes disciplinas tradicionales. Un cambio estratégico de estas dimensiones exige la participación y acuerdo de todos los agentes, ya que debe implicar los consiguientes cambios estructurales y organizativos que respondan a la nueva situación. Para ello hemos procedido a la fusión de algunas Escuelas de la UPM para crear nuevos centros que alberguen este nuevo enfoque de carreras de grado y postgrado. Del mismo modo las carreras traspasan los muros de las Escuelas haciendo participar en ellas a docentes e investigadores de diferentes Centros.
Este nuevo planteamiento ha exigido la elaboración y aprobación de un Modelo Educativo UPM en el que han participado un buen número de personas de todos los sectores de la Universidad y de fuera de ella. Además del modelo se ha procedido a la creación de nuevas normativas entre las que cabe destacar la que regula los planes de estudio que se imparten entre varios centros, la de acceso y matriculación y la de reconocimiento y transferencia de créditos. Documentos como el de Requisitos y recomendaciones para la implantación de Planes de Estudio en la Universidad Politécnica de Madrid han dotado de directrices para los nuevos planes de estudio. Con todo esto es necesario dar relieve a nuevas funciones de coordinación que permitan dar respuesta a las necesidades actuales, cambios normativos y culturales, para configurar una universidad más moderna y que mantenga el liderazgo a nivel nacional e internacional.

Hasta el momento hemos estado hablando de cómo la UPM ha aprovechado las exigencias del llamado “Plan Bolonia” en lo que afecta a su planteamiento estratégico y organizativo. Ahora nos gustaría centrarnos en lo que supone este nuevo enfoque docente con respecto a los alumnos y la sociedad. Uno de esos aspectos importantes es el cambio de métodos docentes centrados en el aprendizaje del alumno. Para ello la UPM se convirtió en la primera Universidad española que aprobaba un reglamento regulando el reconocimiento académico a las actividades de los equipos docentes que trabajaban en temas de innovación educativa. Se puso en marcha un proceso de reconocimiento de Grupos de Innovación Educativa (GIE), que condujo a tener en la actualidad 95 Grupos. De ellos 86 son Grupos reconocidos en la modalidad de consolidados y los nueve restantes están reconocidos en proceso de consolidación. En ellos participan actualmente 936 personas de las que 782 son personal docente y el resto son personal de administración y servicios y personal colaborador externo. Lógicamente, este cambio metodológico ha ido acompañado de cambios de infraestructuras que se han realizado a partir de convocatorias de reestructuración de aulas, para adecuar las tradicionales a las nuevas necesidades y la aportación de nuevas tecnologías al desarrollo de la docencia.
Además de las convocatorias de los GIE, se realiza anualmente una convocatoria de proyectos de innovación educativa (PIE) y mejora de la calidad de la enseñanza. El objetivo principal que se persigue es ayudar al profesorado a diseñar estrategias educativas que puedan trasladarse en su momento a los nuevos títulos diseñados en el marco del Espacio de Educación Superior. En las cinco convocatorias habidas entre 2005 y 2009 se financiaron con algo más de 3.300.000 euros un total de 471 proyectos de mejora de la calidad docente que involucraron a más del 22% del profesorado de la UPM y en los que se generaron un total de 861 becas de colaboración para estudiantes. Además, la Comisión Permanente de la UPM acordó, la financiación de otros seis proyectos en los que participan tres o más Grupos de Innovación Educativa con profesores de más de dos centros. Estos proyectos transversales son los siguientes: Laboratorios Virtuales y Remotos, para la creación de una plataforma virtual que aloje diferentes laboratorios virtuales y laboratorios remotos de la UPM; Ciberaula, para la creación de un espacio web 2.0 para la emisión de tele-clases y la disposición de material audiovisual de clases grabadas en un repositorio para ello; Competencias, para el estudio y análisis del tratamiento de las competencias transversales en instituciones de excelencia a nivel mundial para el desarrollo de un modelo para la UPM; Estrategias Docentes con OCW, para elaborar un modelo que permita la promoción de estrategias docentes basadas en el uso de materiales OCW; Actuaciones de Acogida de Nuevos Estudiantes, con el fin de homogeneizar e implantar actuaciones comunes en todos los centros de la UPM para las iniciativas de acogida y recursos de apoyo a los estudiantes de nuevo ingreso, y Mentoring & Coaching para el desarrollo de actuaciones de Mentoring y Coaching.
No podemos olvidar la importancia que el reconocimiento debe tener en cualquier organización. Para ello, anualmente, convocan premios de Excelencia Docente y Premios de Innovación Educativa en varias modalidades. El tiempo permitirá valorar mejor el resultado de estos esfuerzos realizados en la adaptación al “proceso de Bolonia” pero los primeros resultados son esperanzadores ya que las tasas de rendimiento académico en los cursos implantados en los nuevos grados han experimentado una notable mejoría.

La calidad debería verse desde varias perspectivas. En primer lugar hay que tener en cuenta que toda actividad que se realiza debe ser evaluada para conocer sus fortalezas, debilidades, amenazas y oportunidades. Con este diagnóstico es necesario establecer un plan de mejoras o estratégico, dependiendo del objetivo que se requiera, ponerlo en marcha para mejorar dicha situación y establecer un sistema de seguimiento que permita una evaluación, cada vez más efectiva.
Este enfoque de calidad es lo que permite ofrecer cada vez mejores servicios a la sociedad. Pero este enfoque sería incompleto, y por tanto ineficaz, si no se aplicara a todos los niveles de la organización, a nivel de Universidad, a nivel de planes transversales, a nivel de unidades organizativas (centros, departamentos, servicios, institutos, etc.) y, desde luego, a nivel de personas.
La Universidad es una organización cuyos objetivos fundamentales se centran en la creación y generación de conocimiento a través de su profesorado. Por este motivo es fundamental disponer de una evaluación de la actividad docente e investigadora que permita establecer planes de mejora sobre las diferentes políticas que influyen en el personal docente. Con este propósito, la UPM participa en el programa DOCENTIA de la ANECA disponiendo de un programa de evaluación del profesorado que ha recibido la evaluación positiva de la ACAP (Agencia de Calidad, Acreditación y Prospectiva de las Universidades de Madrid) y se encuentra en este momento en la elaboración de los informes finales de la primera edición. Al cabo de dos ediciones se envía un informe de resultados y propuestas de mejora con vistas a la obtención de la certificación del sistema de evaluación de la docencia de los profesores de la UPM.
En cuanto al Personal de Administración y Servicios se ha creado una Comisión Interuniversitaria para la clasificación de los puestos de trabajo, de evaluación del desempeño y de cumplimiento de objetivos. Esta comisión ha constituido tres grupos de trabajo que actualmente elaboran los estudios de cara a presentar sus propuestas a la citada comisión.
En cuanto las unidades organizativas, la UPM dispone de varias actuaciones, unas al amparo de programas de la ANECA, otras propias y encaminadas a mejorar la calidad de sus Escuelas, Facultades, Institutos y Servicios Universitarios. Entre las actuaciones propias, los Contratos Programa han constituido, desde el año 2005, una herramienta para orientar a las Facultades y Escuelas de la UPM, hacia la consecución de objetivos estratégicos. A través de estos acuerdos se han financiado actuaciones de mejora en función del logro de dichos objetivos.
En lo que se refiere a la evaluación, disponemos de un plan propio de evaluación que les facilita la realización de un diagnóstico de situación para elaborar sus planes estratégicos o de mejora, según sea el caso.
Al hilo de los programas de ANECA, en 2007, se publicó el programa AUDIT que tiene por objetivo orientar en la elaboración de los Sistemas Internos de Garantía de la Calidad de los Centros Universitarios (SIGC). La UPM acudió a dicha convocatoria con el diseño del manual de calidad, mapas de procesos y definición de procedimientos de cuatro de sus veinte Centros Docentes. Una vez obtenida la certificación del diseño de estos sistemas, se elaboró un modelo para todos los centros de la Universidad y actualmente disponemos de todos los SIGC de los Centros con certificación de su diseño. En estos momentos estamos procediendo, de forma escalonada, a la implantación de los mismos. Dicha implantación se está realizando de forma automatizada mediante un “motor de gestión por procesos” con el fin de que nos permita modernizar la gestión y facilitar la reflexión para la mejora a todos los agentes que intervienen en ellos, disponiendo de registros históricos y actualizados que disminuyan el nivel de burocratización que podrían ocasionar de no ser abordados de este modo.
Este proyecto supone un paso definitivo de cara a la modernización y agilización de la gestión en nuestra Universidad, contribuyendo de modo decisivo a que la UPM pueda dar respuesta a los objetivos de compromiso y responsabilidad que ha adquirido, relativos a: Primero, establecer las bases necesarias para asegurar un adecuado seguimiento de la implantación de los diferentes títulos oficiales, a fin de facilitar y propiciar la toma de decisiones que mejore, de forma continua, la calidad de los resultados obtenidos (responsabilidad interna). Y segundo, disponer de mecanismos y protocolos necesarios para una adecuada rendición de cuentas sobre el desarrollo de los títulos oficiales, garantizando la publicación de la información de acuerdo a los diferentes grupos de interés (responsabilidad externa).

Pues precisamente, en esta segunda vertiente de responsabilidad externa, se centra otro de los programas de ANECA, quizás el más importante en estos momentos, el programa MONITOR, a partir del cual se pretende hacer un seguimiento de la evolución de la implantación y resultados de los títulos universitarios de grado y máster. En este caso el seguimiento de títulos lo realizará la ACAP para las Universidades de Madrid. Todo hace pensar, hasta el momento, que con este seguimiento de títulos se están estableciendo las bases para la futura acreditación de títulos oficiales universitarios a la que obliga la legislación vigente.
Es decir, estamos hablando de que la universidad debe someter a evaluación sus títulos, tanto antes de ponerlos en marcha, como una vez se han producido sus primeros titulados. El riesgo de no conseguir la acreditación es que el título dejará de ser oficial.
En la UPM tenemos el convencimiento de que, sea cual sea la exigencia que se imponga a las Universidades en cuanto al seguimiento y acreditación de títulos, éstas serán debidamente cumplidas si se aborda internamente de modo que facilite la reflexión sobre el desarrollo de la docencia y sus resultados, incorporando a los profesores y responsables docentes, de modo que se les facilite la tarea de gestión que todo ello implica. El seguimiento de los títulos de la UPM se plantea, pues, teniendo en cuenta las siguientes características: Será un proceso automatizado que aporte a los responsables académicos la información suficiente para que se reflexione sobre los resultados y las causas que los originan. Es un proceso en el que se coordina la actuación de los diferentes grupos que intervienen. Su finalidad es la mejora continua de los profesionales que la UPM ofrece a la sociedad. Y, finalmente, ará transparencia y visibilidad a la docencia aportando a los diferentes grupos de interés información suficiente para la toma de decisiones.
Convencidos de que un buen seguimiento propiciará la acreditación, obligatoria en España, de los títulos de grado y postgrado en un futuro, la UPM, considera que la acreditación de sus títulos debe aportar un valor añadido tanto a los titulados como a la sociedad. Por ello, se ha comenzado con un plan de acreditación internacional que ha dado sus primeros frutos con la acreditación de los títulos de Ingeniero Industrial e Ingeniero de Telecomunicaciones en la prestigiosa agencia estadounidense Accreditation Board for Engineering and Technology (ABET).
Recientemente, la Escuela Universitaria de Arquitectura Técnica ha obtenido el reconocimiento del Sello de Excelencia 400+ de la European Fundation for Quality Management (EFQM), siendo una de las pocas Escuelas que poseen el galardón a este alto nivel.

Los centros Universitarios, como ya hemos comentado, disponen de un SIGC que se está implantando de forma automatizada. Para elaborarlo, lo primero que se ha hecho es realizar el mapa de procesos del centro en el que se clasifican los procesos estratégicos, clave y de soporte que constituyen la actividad de los mismos.
Dado que dichos sistemas se han diseñado teniendo en cuenta la mejora continua de los mismos y de sus procesos, todas aquellas actuaciones de los centros relativas a los servicios, personal de apoyo, bibliotecas, etc. están incluidas en los procesos de soporte del Centro. Por este motivo se han definido y están en fase de automatización dentro del proyecto de implantación de los SIGC.
Las cartas de servicios también son un instrumento de mejora y compromiso que comienzan a calar en los servicios universitarios. Prueba de ello es que la Biblioteca Universitaria ya dispone de ella y la Facultad de Informática está desarrollando las de sus servicios en el marco del proyecto “Madrid Excelente”.

Indudablemente que todas las actuaciones docentes tienen como principal protagonista y destinatario al alumno. Su opinión es de un gran valor para mejorar todas las actividades en las que están implicados.
En este sentido, el programa DOCENTIA, ha venido a incorporar las encuestas que sobre la docencia de los profesores realizaban los alumnos desde hace años, a un sistema de evaluación 360º, en el que participan directores de Departamento de Centro, el propio profesor evaluado, evaluadores externos y una Comisión de Evaluación que emite un informe sobre la evaluación de la docencia de los profesores.
En el proyecto Demanda, los alumnos que se matriculan por primera vez participan en una encuesta a partir de la cual y, complementada con otros instrumentos y pruebas, se define el perfil de entrada de los alumnos de la UPM. La información que se obtiene aporta, a su vez, información necesaria para el desarrollo, entre otros, de actuaciones con colegios de secundaria de los que proceden nuestros alumnos.
Por otra parte, existen varias encuestas que se realizan a los alumnos, tanto en los primero cursos, a lo largo de su carrera y una vez titulados, que nos permiten medir la satisfacción que de su paso por la Universidad tienen, así como una vez que han concluido sus estudios y al cabo de tres años de desempeño de la profesión. La visión de los alumnos se ve complementada con la que aportan los empresarios en las encuestas que periódicamente se les realizan. Todas estas encuestas se complementan con encuestas de satisfacción de los servicios que desde las unidades organizativas se realizan.

Junto con el cambio metodológico, una de las grandes fortalezas que ha aportado el movimiento generado por el Espacio Europeo de Educación Superior (EEES) ha sido el desarrollo de actuaciones que mejoren la atención y ayuda que se presta a los alumnos, desde antes de entrar en la Universidad, durante su estancia y una vez terminados sus estudios, tanto a través del apoyo a su inserción laboral como a lo largo de su vida profesional mediante la formación de postgrado y las actividades que mantienen los Centros con los antiguos alumnos. Para ello se realizan visitas a colegios de secundaria, presentaciones en ferias, se prepara documentación informativa en diversos formatos, sobre todo Web, se realizan tutorías académicas y curriculares, se dispone de programas Mentor y el COIE, junto con las unidades de responsables de los Centros, desarrollan actividades para facilitar las prácticas en empresas, así como la inserción laboral de nuestros titulados.
No hay que olvidar que uno de los grandes objetivos es promover la movilidad de los alumnos a través de estancias en otras Universidades nacionales e internacionales. Esta movilidad se ve favorecida por el Programa Erasmus que facilita becas para estancias en otras Universidades y para Prácticas en Empresa en países de la Unión Europea. Los acuerdos de Doble Titulación que la UPM mantiene con Universidades de todo el mundo disponen también de programas de becas.

La actividad investigadora individual de la mayoría del personal docente e investigador de la Universidad Politécnica de Madrid, como el de las demás universidades públicas españolas, es evaluada periódicamente, cada seis años (los llamados “sexenios”), por la Comisión Nacional de Evaluación de la Actividad Investigadora, vinculándose una parte de su salario al resultado de dicha evaluación. Y en ello se aplican criterios comunes para todos los profesores de la misma “rama” de investigación independientemente de la Universidad en la que realicen su labor: publicaciones realizadas en revistas de alto índice de impacto, grandes proyectos de investigación en los que ha participado o que ha dirigido, tesis doctorales que haya dirigido, patentes que haya obtenido…
Pero al margen de esta evaluación individual del profesorado, la UPM tiene unas características propias, que se pueden resumir en que la inmensa mayoría de su profesorado desarrolla su labor en áreas tecnológicas muy próximas al ámbito productivo. Dispone así, al igual que otras Politécnicas españolas, de una situación propicia para hacer de puente entre la generación de conocimiento y su transferencia a la empresa. Por ello la UPM tiene una intensa actividad en la suscripción de contratos con entidades públicas y privadas que se traducen en que es la universidad pública española que mayor margen de autofinanciación consigue en sus presupuestos. En torno a estos contratos se nuclean muchos de nuestros grupos de investigación.
En el ámbito internacional, este papel aglutinador de esfuerzos se desarrolla a través de distintas vías, entre las que merece destacar el Programa Marco de Investigación de la Unión Europea. En su séptima edición la UPM es la primera institución universitaria española en cuanto a proyectos en los que participa su personal investigador, siendo la segunda a institución española sólo superada por el CSIC. Estos datos reafirman la tendencia que ya tuvo en el 6º y 5º programa marco.
Hay otros dos aspectos que también han contribuido a organizar y coordinar de manera más eficiente los esfuerzos investigadores. El primero, de carácter interno, ha sido la puesta en marcha de dos iniciativas aglutinadoras de equipos de investigación: BIOTECH y AEROTECH. En tono a la primera se están produciendo sinergias entre investigadores en biotecnología (mejora en cultivos de plantas, genómica, biocombustibles…) y en ingeniería biomédica (más enfocado a aplicar los resultados de investigación a la salud humana así como, en colaboración con otras instituciones, al estudio y modelación del funcionamiento de órganos del cuerpo humano, con un importante proyecto en torno al cerebro y a combatir enfermedades cerebrales tales como el Alzehimer o el Parkinson). Por su parte la iniciativa AEROTEC coordina la importante actividad que la UPM viene desarrollando desde hace años en el ámbito aeroespacial, propiciando la intensificación de colaboraciones con distintos organismos internacionales.
El segundo impulso de coordinación lo ha marcado, sin duda, la obtención de dos distinciones como Campus de Excelencia en la UPM. La primera en el campus de La Moncloa, conjuntamente con la Universidad Complutense de Madrid, y que se ha estructurado en torno a cinco grandes líneas de actuación:” Cambio global y nuevas energías”, “Materiales para el futuro”, “Agro-alimentación y salud”, “Medicina innovadora” y, finalmente “Patrimonio”. Ello está permitiendo poner en marcha grupos de investigación entre las dos universidades participantes, con el refuerzo de investigadores de otros lugares del mundo, en los temas señalados. El segundo Campus de Excelencia, otorgado en esta ocasión a la UPM en solitario, es el Campus de Montegancedo, en el que la UPM lleva varios años realizando fuertes inversiones en Centros de Investigación, en viveros de empresas y en el Centro de Supercomputación y Visualización de la Comunidad de Madrid. En este segundo Campus de Excelencia Internacional, la UPM desarrollará actividades en torno a las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones, la Biotecnología y la Ingeniería Biomédica y la ingeniería aeroespacial.
Todas estas actividades son periódicamente evaluadas, tanto a nivel interno por el propio Vicerrectorado de Investigación de la UPM como a nivel externo por los organismos que conceden los proyectos europeos o los sellos de Campus de Excelencia. De los buenos resultados que se van obteniendo en estas evaluaciones depende en buena medida la continuidad de estas actividades.
A las anteriores iniciativas se suman otras como son el continuo impulso al Parque Científico y Tecnológico de la UPM (con sedes en el Campus de Excelencia Internacional de Montegancedo, en el Campus Tecnológico de Getafe, en el Campus Sur ubicado en Vallecas y, de manera más incipiente, en el que se está implantando en el término municipal de Alcobendas) o la participación en la red de Institutos Madrileños de Investigación Avanzada propiciados por la Comunidad de Madrid.

Como hemos resaltado anteriormente la UPM es una universidad que quiere estar estrechamente vinculada a su entorno social tanto geográfico como temático. En el ámbito del desarrollo económico español y europeo, además de los datos ya antes citados de la participación de la UPM en los programas marco europeos de investigación, cabría señalar que una muestra de la gran actividad de convenios de colaboración que se tienen con empresas e instituciones en el terreno del I+D+I son los 45 millones de euros que anualmente se contratan para el desarrollo de estas actividades.
Pero no es sólo por la cooperación con el entorno “occidental” por el que la Universidad se preocupa. En este sentido, cabe señalar la intensa actividad cultural y deportiva que desarrollada, en todos sus Centros, la UPM o el hecho de ser una de las universidades españolas pioneras en actividades de cooperación al desarrollo con importantes actividades tecnológicas que se desarrollan en apoyo de las sociedades de numerosos países en vías de desarrollo.